Carta al continente oceánico
Victoria Pascualini
Pascualini (@universa.emergida) nos recibe completando de poesía la edición núero seis: poesía porosa, llena de imágenes y tensión, con fantasías inundadas de delirio y soledad, tal como nos gusta. Nos muestra su lado más romántico y delirante en ocho poemas de amor y desamor en ciudad.
llueve siempre donde vivís
tu exnovia se mató un verano
con el pico de una botella
conociste islas caribeñas
La Habana
un país sin tiempo
había fiestas en las casas derrumbadas
un escombro con forma de hombre
te sedujo la anatomía del alambre
vivís por dejar la sombra exhausta
viste una estela brillante
te enamoraste del frío
corriste y una ciudad en el norte te abrazó
girás por el planeta
¿tenés una deuda pendiente
con los fantasmas de esos imperios?
¿por qué insistís en conocerlo todo?
nunca deja de ocurrir la ausencia
es la materia prima de este invierno sin riqueza
tenés los ojos negros
de un perro sin casa
tu novia atada a la camilla
el avión en la pista
sin ruta para traerte de nuevo
la flecha en el corazón
la clavaste una la madrugada
se me cerró la palabra
con un émbolo
reventó la herida
que crecía para atrás
fuimos confidentes
de tu recuerdo cuelgo
algunas noches
tenés la forma de un amigo
el color de la cama marinera
un tatuaje escondido en la cocina.