Pascualini (@universa.emergida) nos recibe completando de poesía la edición núero seis: poesía porosa, llena de imágenes y tensión, con fantasías inundadas de delirio y soledad, tal como nos gusta. Nos muestra su lado más romántico y delirante en ocho poemas de amor y desamor en ciudad.
la herida en el plástico,
la ilusión un juguete quebrado
por el rumor de una fiesta
no le creas a las luces parpadeantes
un semáforo en zonas desoladas
la baliza de un auto siempre listo para darse a la fuga
un cartel de bifurcación
el punto de una bomba activada
duró tan poco la euforia
microcentro es un desarmadero
y la ciudad un espejismo de lo que ya no existe
no quiero
el gusto sintético en la lengua
la sustancia
el látex la forma de acercar tus dedos
lo artificial del sentimiento sin nombre
una sociedad secreta
se acuesta con mujeres de partes mecánicas
piernas mutiladas
una prótesis mojada
la caricia robótica
la carne gris descansando sobre la almohada
¿SERÉ SOLO INSTRUMENTOS ENSAMBLADOS?
el gesto de un sistema operativo
sin miedo a perderlo todo
no encuentro la parte mía que te nombraba
y sentía calor
hundido bajo placas de chapa
los pulmones perforados respiran a través de un vidrio roto
soy el cuerpo dormido
el corazón postizo
que no late sin la descarga
volvimos al inicio
la tierra roja cubre la ciudad
nieve en los inviernos del milenio pasado
animales carroñeros me rodean
tienen hambre y yo no tengo lugar al que volver entera
no hay repuestos
se me caen partes
camino por la avenida vacía
la boca hecha de lata
el homicidio consensuado
las arterias arenosas
en el hemisferio sur hubo una sociedad secreta
mataba chicas
sabían regalarles
máscaras brillantes
cuerpos para bailar cerca del fuego
no quemarse
solo sentir la nuca caliente
la fiesta terminó hace tanto.